viernes, 20 de junio de 2008

Tropiezos

El ser humano tiene la asombrosa capacidad de tropezar con la misma piedra una, dos, tres, infinitas veces. Siempre, quizás, sostenido por la ilusión de que ésa, aquella y cada vez, será diferente. Intuimos y nos hartamos de experimentar que vamos a volver a equivocarnos, y, sin embargo, nos ilusionamos evocando la experiencia del ayer, como si ése fuera nuestro as en la manga para no tropezar. Y cuando nuestros tropiezos se relacionan con el campo sentimental suelen tener ciertos agravantes, porque los sentimientos escapan a nuestra razón. Cuando nos enamoramos, o al menos eso creemos, no podemos disimular nuestro estado. El amor suele representarse como un niño desnudo porque es una emoción que no puede ocultarse, porque permanece igual a sí mismo siempre, porque nunca aprende, siempre es idéntico, eternamente joven e irreflexivo. Nuestra razón, espantada, nos asalta con preguntas recurrentes, para acercarnos a la desoladora conclusión del “Yo nunca aprendo”. Y estamos en lo cierto, porque el amor permanece impermeable a la experiencia.
Tropezamos, caemos, nos lastimamos y nos juramos nunca jamás reincidir. Y volvemos a ser prisioneros de lo correcto y lo seguro hasta que el amor loco nos arrebata nuevamente, porque gracias a él podemos evadirnos de nuestra asfixiante individualidad, porque todos llevamos dentro de nosotros, agazapada, nuestra propia posibilidad de perdición, el abismo íntimo por el que podemos desplomarnos; y a menudo la llave de nuestro fatídico destino está oculta dentro del niño irreflexivo que insiste en hacernos tropezar con la misma piedra una, dos, tres, infinitas veces.

44 comentarios:

DudaDesnuda dijo...

No. No. No y, además, NO. El tema, el grándisimo tema es no llamar "Amor" a enamoramientos, a ganas de una revolcada, a calenturas momentáneas, bah.
Porque te puedo asegurar que cuando te equivocás con el Amor, con el que para vos era verdadero amor, es muy difícil que vuelvas a equivocarte y, de "el niño irreflexivo que insiste en hacernos tropezar con la misma piedra" no queda ni una uña para hacerle un ADN en nuestro interior.

Lo que viene después del amor es cartón pintado, nena.

Besos y opiniones

Beya dijo...

Bueno, Duda, entre el amor y una revolcada hay millones de años luz y creo que es fácil de distinguir.
¿Muy difícil de equivocarte? Guau. Mirá vos, yo le he pifiado bastante, bastante y varias veces.

Chiru dijo...

yo siempre me enamoré, hasta en las revolcadas (lo que sea para decir que me revolqué por amor :þ )

Y por suerte, nunca aprendí a no equivocarme, porque solo así, pude seguir arriesgando, seguir apostando y en definitiva, seguir festejando.

de mayúscula a minúscula dijo...

beya, acá se nota la diferencia de edad porque me uno a las palabras de duda
después de una caída, cuando realmente fué amor no se caé igual
algo cambia, nos transforma, esa niña ya es otra

Beya dijo...

Ay, Chiru, contagiame...

Beya dijo...

No sé, Mayu. Yo viví grandes amores y, por más que cada uno fue diferente, la sensación y el golpe fueron siempre iguales.
Aclaro que no me refiero a equivocarse con la misma persona. Eso nunca me pasó, menos mal.

Anónimo dijo...

OH!
Mayu y Duda son fantásticas!!! qué mujeres!
Demás decir que opino lo mismo, graciasadiós.
(qué económico que me salió el comentario con estas minas por acá)

*La Casalinga* dijo...

Creo que hay infinitas formas de amar y que se puede caer infinitas veces en las garras de esta gravísima enfermedad inmunológica que es el amor.
Pero pasa como con casi todas las enfermedades que dejan una huella en el organismo:

la primera vez, te mata pero también, te crea defensas para las próximas que seguramente vendrán y ya no será tan traumático salir a flote.

Dejo la pelotuda seriedad que me invadió por un segundo y concluyo:

cuando pasa mas de dos veces es que la falla está en una.
La experiencia que sirva de algo.

Anónimo dijo...

No sé, esto está muy serio y lleno de señoras, mejor me quedo callado en un rincón y no molesto.

GABU dijo...

"PORQUE TODOS LLEVAMOS DENTRO DE NOSOTROS, AGAZAPADA, NUESTRA PROPIA POSIBILIDAD DE PERDICIÓN, EL ABISMO ÍNTIMO POR EL QUE PODEMOS DESPLOMARNOS..."

Asì,tal cual,satamente,en concreto y con el gravamen que lo siento dentro mìo,despertàndose y en mayùsculas...

:(

BESO

de mayúscula a minúscula dijo...

refiriéndome al comentario de sonia, no sé si lo que crea sean defensas
supongo que también, pero básicamente una aprende algo, a ver mejor, el duelo es otro, no vuelven a ser las mismas heridas que una permitió anestesiada

Julieta dijo...

Yo tuve la suerte ,o no ,de enamorarme muy jovencita y casarme con ese hombre que aún está a mi lado.A veces pienso ,no conocí otro tipo ,no puedo comparar ,a lo mejor me perdí muchas cosas...

El Angel Gris. dijo...

Richard Linklater lo explicómejor que nadie.

Un videoclú que no tiene "Antes del amanecer" merece ser borrado del mapa por una bomba.

Anónimo dijo...

Beya: el 80 por ciento de tus post tienen que ver con este tema. Escrito de otras maneras, puntualizando un caso, desde la bronca, o desde la decepción, pero siempre con esto.
Ojalá logres lo que estás intentando, aprender de vos misma y dejar atrás lo que te hace mal.

Anónimo dijo...

El tema es cuando dos tipos se parecen tanto, tanto, que tropezarte con uno es como volver a tropezarte con el otro.
En eso estoy yo.
A punto de tropezarme de nuevo con la misma piedra.
Mismo perro, distinto collar.
Mismo error, diez años después...

"Si perdí la razón,
no fue por amor,
fue por soledad."

pal dijo...

cooki, eso lo firma Fromm... y es una de las cosas de él que me dejaron sin aliento.
Siempre habría que revisar si la pasión y la pérdida de cabeza es proporcional a las ganas de no estar sola.
Porque al final no aman más quien "por amor" se arroja a los rieles del metro, sino el que es capaz de crear con otro el día a día.

Mis favoritas: Duda, Mayu y Ashi.

Anónimo dijo...

Y te fijaste que tooooodas las veces que hablás de esto Duda, Mayu, Pal y yo te decimos lo mismo?
Es fija, fija. ¿Por qué, Beya?

Laura Palisa dijo...

Y... es una fija también mi comentario expresando cuán identificada me siento :S


Rescato del post, como buen punto de partida, el "darse cuenta" de dónde trastabillamos, dónde patinamos feo.
Pero es obvio que debe haber algo mas que no vemos y que se nos está escapando.

La que lo avizore primero que avise! ;)

Beya dijo...

Me parece que no estoy siendo muy clara, voy a poner un ejemplo práctico.
Hace unos años entablé una relación con un sujeto brillante, creativo, agradable, cálido y demás adjetivos perfectos. Pero llevaba diez años de convivencia con la novia, por lo que nuestro vínculo era más platónico que otra cosa. Finalmente, y después de deshacerse en declaraciones de amor (recuerdo una preciosa en un restaurant), se separó.
Pero de las dos. No volvió a dirigirme la palabra.
Con la carta de la experiencia en la manga juré no volver a vivir una situación similar nunca jamás. De más está decir que vengo de remontar algo bastante, bastante similar.

Quizás debería arreglar mi post diciendo que el ser humano que se equivoca siempre de la misma manera, es un reverendo boludazo (y parece que yo estoy en el grupete).

Beya dijo...

Depende, Sonia. Yo creo que a medida que pasa el tiempo, recuperarse es más doloroso. Algo similar ocurre en medicina, ya que hablamos del tema. No es lo mismo operarte de las amígdalas a los cuatro años que a los 25, a los 30, a los 50... El post operatorio es cada vez peor.

Beya dijo...

¡Jajaja, Guty! ¿Muy serio? ¿Vos decís? Nah, en estos tiempos que corren, ya no escribo nada serio ¿?

Beya dijo...

Cuántos abismos, Gabu, y qué fácil rodar por ellos...

Beya dijo...

¡No, Mayu, no son las mismas! ¡Son peoressss porque encima sos más grande y el papelón de darte cuenta de que sos una bolas tristes es mayor!

Beya dijo...

Ashiku, estoy intentando leer y "estudiar" mucho sobre el tema. Por ahora lo único que me queda claro es que en el plano del amor, todo, absolutamente todo es taaaaan subjetivo...

Beya dijo...

Julieta: quizás no.

Beya dijo...

Ufa, Angelito, voy a preguntar en el BloSbaster antes de incendiar todos los video club del barrio.

Y sino, cuando vengas, traémela, pls y yo la paso a buscar.

Beya dijo...

¡Al fin, Cookie, una que me comprende! El problema es que con el tiempo a veces no distinguimos amor/enamoramiento de conformismo.

¿Y si esta vez no es una piedra sino una posibilidad? Es la pregunta que nos invita a volver a tropezar. ¿Es??

Beya dijo...

¡¡Exacto, Pal!!! Todos los días me pregunto si, con tal de no estar sola, es mejor estar con cualquiera. En definitiva, a veces estar solo es también una elección.

Beya dijo...

¿Por qué Ashiku? Pffff, por mil millones de motivos; por realidades únicas, supongo. Es difícil también emitir un juicio determinado sobre circunstancias desconocidas.

Beya dijo...

Sí, Lau, lo sé. Justo hoy hablaba con Carito del tema, un poco lo que le digo a Cookie.
Si las cosas se dan espontáneamente pero descartamos por la etiqueta que trae el envase... ¿Qué hacemos? ¿Descartamos a todo el mundo? Todos tenemos siempre algo, una historia, temores, amores previos... Salvo que andemos en los quince, ya no somos "puros" frente a un nuevo vínculo.

Laura Palisa dijo...

En el darse cuenta no me referia a éso. Sino que deberiamos tener en cuenta el hecho de que "oh casualidad" y "espontáneamente" nos vinculamos con personas con las que no podemos llegar a nada.

La elección no es buena. Ahi supongo que está el error. Porque si uno lo piensa bien, desde el primer momento uno tantea el peligro pero es como dejarse tentar por una apuesta que de antemano está perdida.

Bah no sé, hablo por mi, es lo que yo descubrí, nada mas. Seguro con éso me alcanza para entrar al grupo de las boludazas :P

Beso y PD. esto no se está poniendo demasiado personal??

Anónimo dijo...

No Beya, o sí. Todo es personal en el amor, pero es una cuestión universal.

Yo a veces creo haber aprendido, no me agarran más para el cachetazo. En cuanto veo que la cosa se pone complicada al pedo, chau, cambio y fuera. Pero bueno, ¿quizás por eso estoy solo?

Carito dijo...

Mira, te lo dije y te lo repito... Lo que tenes que hacer es disfrutar, no importa el modo, sino que de todas las experiencias que tengas en tu vida algo tenes que disfrutar y si no sirve, desecharlo.
Es decir, y perdon cookie por usar tu metafora, si el perro te mea la casa lo mandas a la calle, ahora si el perro al menos te hace fiesta cuando llegas lo dejas adentro y con una palmadita.
Que se yo, tampoco esta bueno que te metan el perro.

Mariscal dijo...

No hay que andar con tantas vueltas. Hay que salir, revolcarse, amar..
porque está bueno, no porque sea algo tan complicado.

Laura dijo...

Beyi, ¡qué "prolijo" tu escritorio!

Beya dijo...

Entendí, Lau, entendí que apuntás al tema "elección". Pero no siempre nuestras elecciones son el problema. Creo que hay miles de factores en juego. Además, ¿cómo saber si estamos incurriendo en un nuevo error? Teóricamente no deberíamos, porque para eso tenemos en nuestro haber la famosa experiencia.

Pero...

¿Muy personal? ¿Por? A ver... ¿?

Beya dijo...

Es verdad, Carito, quizás la clave sea disfrutar sin comprometerse demasiado. Después de todo, estamos en la era del no-compromiso.

Interesante metáfora la del perro...

Beya dijo...

No sé, Maestruli, no sé cuál es la clave. ¿Cuántos "cambio y fuera" puede soportar uno?

Beya dijo...

¡Bienvenido Mariscal!
¿Vos decís? ¿Hay que besarse más??

Beya dijo...

Sí, Lau. Soy esclava del orden... :P

Ginger dijo...

El problema es que somos nosotras las que apuntamos mal, Beya.
Una vez, dos y hasta tres se puede pecar de ingenua. A la cuarta más que ingenuas somos salames.
Bah, hoy me levanté mala, así que no me tomes muy en serio.

Beya dijo...

Es que tenés razón , Gin. Por eso digo que: "Quizás debería arreglar mi post diciendo que el ser humano que se equivoca siempre de la misma manera, es un reverendo boludazo (y parece que yo estoy en el grupete)".

Laura Palisa dijo...

"Muy personal" porque estaba hablando demasiado de miiiii :D

Beya dijo...

Bueno, Lau, si vos hablás demasiado de vos, entonces no sé qué me queda a mí :)